Unos 200 delegados de la región, entre ellos una decena de obispos, participan desde ayer y hasta mañana en las instalaciones de la Universidad Católica de Chile, en Santiago, del II Congreso RIIAL (Red Informática de la Iglesia en América Latina) Iglesia y Cultura Digital, cuyo lema es “Construir redes inteligentes llenas del Espíritu Santo”.
Las jornadas fueron organizadas por el Consejo Pontificio para las Comunicaciones Sociales y el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) a través de la RIIAL, junto con la Conferencia Episcopal Chilena y la Universidad Católica de Chile.
Tienen como objetivo, se explicó, “impulsar la comunión eclesial y responder a las exigencias comunicacionales de la Misión continental y la evangelización permanente, en el contexto de la cultura digital y las características de la sociedad-red en este cambio de época histórica”.
Participan monseñor Claudio María Celli, presidente del Consejo Pontificio para las Comunicaciones Sociales; el nuncio apostólico en Chile, monseñor Ivo Scapolo; el presidente del Departamento de Comunicación y Prensa del CELAM, monseñor Adalberto Martínez Flores; la coordinadora general de la RIIAL, Leticia Soberón; los obispos presidentes de la Comisiones Episcopales de Comunicaciones, y miembros de la RIIAL.
Ayer, tras la misa de apertura, los temas y expositores fueron “Cultura digital, ejes y características esenciales”, doctor Jorge Hidalgo (México); “Cloud computing, nuevos paradigmas”, monseñor Lucio Ruiz (Santa Sede) y “Lenguajes multimediáticos, ¿reducción conceptual?”, Valerio Fuenzalida.
En tanto, hoy uno de los expositores fue el arzobispo de Mercedes-Luján y presidente de la Comisión Episcopal de Comunicación Social, monseñor Agustín Radrizzani, quien se conectó con los congresistas a través de una video conferencia, ya que no pudo viajar al país trasandino a raíz de la cancelación de vuelos en Buenos Aires por la nube de cenizas del volcán chileno Puyehue.
Palabras de Mons. Celli y otros expositores
Monseñor Celli recordó en la apertura que “no somos discípulos de una ideología sino de una persona, Jesucristo”, y advirtió que “no vendemos productos, lo nuestro no es publicidad, para anunciar hay que comprender quiénes somos, quiénes son los habitantes de este continente digital, hay que construir redes inteligentes llenas del Espíritu Santo”.
“La Iglesia si no es comunicación no es Iglesia. La Misión continental anima a construir comunidades vivas y palpitantes. Pero esa Misión, sencillamente, no puede realizarse sin comunicación: es comunicación”, subrayó.
El prelado vaticano destacó la importancia de profundizar una Teología de la Comunicación y estimó que el mayor desafío es utilizar un lenguaje que llegue al corazón.