Escuela de Monaguillos

La Escuela de monaguillos es una institución diocesana encargada de la formación de los monaguillos o servidores del altar, en la cual el Seminario colabora directamente, en cuanto uno de sus miembros y coordinador es formador del Seminario y cada reunión de la Escuela cuenta con la presencia de los seminaristas.
Tiene por patrones a San Tarcisio y San Domingo Savio.

1. Objetivos

A) Próximos
Formar a los monaguillos de nuestra diócesis en una participación cada vez más consciente, activa y fructuosa en la celebración litúrgica, especialmente en la celebración de la Eucaristía.

B) Remotos
Ayudar a los monaguillos a avanzar por caminos de santidad, con una vida de unión con Jesucristo (cuyo misterio crean, celebren y vivan con él una relación viviente y personal), y cultivar en ellos los gérmenes de la vocación específica a la que el Señor les llama, prestando particular atención a una posible vocación a la vida sacerdotal, de la que ya es un indicio el deseo de servir junto al altar.

2. Organización
La Escuela de monaguillos la dirige una Comisión formada por los sacerdotes: Raymond Anagboso, José Basadre, Óscar Herrera y Álvaro Aedo.
La Escuela de monaguillos tiene cuatro reuniones en el año, la primera siempre es en la Misa Crismal, y las otras tres en las dependencias del Seminario Mayor San Pedro Apóstol.

3. Reuniones año 2018
1º. Misa Crismal miércoles 28 de abril. Catedral de San Bernardo.
2º. Sábado 26 de mayo. Seminario Mayor San Pedro Apóstol.
3º. Sábado 11 de agosto. Seminario Mayor San Pedro Apóstol.
4º. Sábado 15 de diciembre. Seminario Mayor San Pedro Apóstol.

4. Contáctenos
Junto con tener una sección en la revista diocesana “Iglesia en San Bernardo”, pueden seguirnos en Facebook y escribir por e-mail.

 Correo electrónico: monaguillossanbernardo@gmail.com
 También estamos en Facebook:Monaguillos Diócesis de San Bernardo

5. Oración del monaguillo

Señor Jesús,
gracias por que te fijaste en mí
y me haz llamado para ser tu servidor
en la liturgia de la Iglesia.

Quiero ser tu amigo,
y entregarme siempre
con alegría y responsabilidad.
Quiero alabarte con mi entrega generosa y fiel.

Enséñame, Señor, a amarte cada día
y a dar testimonio de tu amor.
Ayúdame a ser un buen estudiante,
a ser servicial en la Iglesia,
con mi familia y en todo lugar.

Virgen María,
haz que sea un buen Acólito;
humilde, auténtico y puntual.
Enséñame a rezar
y a parecerme a tu hijo Jesús.

Amén