El pasado 28 de diciembre, Monseñor Juan Ignacio González presidió en la Iglesia Catedral de San Bernardo, la Misa en recuerdo de todos aquellos niños concebidos y no nacidos, además se pidió por todas las familias de la Diócesis.
La ceremonia litúrgica, que fue organizada por la Vicaría para la Familia, contó con la asistencia de números fieles, religiosas, representantes del movimiento de Encuentro Matrimonial, y del Proyecto Esperanza.
En su homilía el obispo de San Bernardo destacó que “Muchas veces aparecemos como retrógrados porque defendemos la vida. Incluso podemos ser perseguidos, como los niños inocentes, por mantener nuestra fidelidad, no solamente la verdad de nuestra fe católica y natural al ser humano y es que nadie tiene derecho a levantar la mano contra un ser ya concebido… Es por eso que en esta Santa Misa pedimos por todos los inocentes que han muerto en el mundo, pero particularmente en nuestra Patria a raíz de la promulgación y ejecución de la Ley que permite el aborto”.
Además señaló que “Nosotros creemos firmemente, que pese a haber separación entre Estado e Iglesia, Chile es una sociedad cristiana, fundada en los valores de la fe cristiana. Por tanto, luchamos fervorosamente, aunque a veces ganamos o perdamos, tenemos que luchar contra le Ley de Aborto”.
Al finalizar enfatizó que “Las familias, es el corazón de la Patria, y de la Iglesia. El corazón de una sociedad es una familia fundada sobre el hombre y una mujer unidos para siempre en el matrimonio. Las familias es una de las prioridades esenciales de nuestra Diócesis, porque si no hay familias se desarma la sociedad en que vivimos”.